Diputados y senadores se acaban de aumentar en un 15% sus respectivas dietas, maldita la polisemia. Eso da, desde el 1º de enero a la fecha, un total del 33%, ya que en marzo habían procedido a reajustarse un 19% más, por lo que el 15% fue sobre el 119% anterior. Un representante del pueblo argentino a través del cual éste gobierna porque no hay democracia directa que, por un decir, al finalizar el sacudido año pasado, embolsaba 10 mil pesos, a partir de ahora va a hacerlo con 133%. Ni el Morocho Moyano & The Gordos Troupe es capaz de semejante hazaña.
Para dejar de andar en floreos, cada uno de estos patriotas, con algunas migajas extras y demás, de ahora en adelante va a redondear no menos de 20 mil mensuales hasta un máximo de 30 mil, tampoco se trata de ser tan repugnantes, las pilchas están cada vez más caras, las minas muletos se ponen más exigentes y las mujeres legales todas quieren la marroquinería y los aros de la Cris.
Dios, que como todo el mundo sabe es argentino de pura cepa, tuvo a bien iluminarlos justo en el momento en que su representante legal en la Tierra, el alemán que está en la Plaza de San Pedro, emitía una declaración de aseguraba que la pobreza en en la Argentina es escandalosa.
Asquerosa, hubiera quedado mejor.
Sobre todo en un país donde 7 de cada diez son justicialistas y el reciente ex presidente en el Ejecutivo de dos plazas cobra una jubilación de 27 mil pesos.
Este vómito en forma de letras, que el ex corresponsal y partidario de Domingo Cavallo, Carlos D'Elía, calificará inmediatamente como perteneciente a la puta oligarquía, así dormimos tranquilos, sucede cuando el tarifazo negociado con las multinacionales para después de las elecciones, destinado a joder a los que más tienen, ha terminado de reventar a los que menos tienen con aumentos hasta del 400%. Los parlamentarios también esperaron prudedentemente un mes para su reajuste propio, cosa que sirviera de lubricante y no doliera tanto.
Como marmotas son los que sobran, lamentablemente no se va a argumentar que con la plata de este engorde del bolsillo de los que ni siquiera concurren a sesiones se van a solucionar los endémicos y terminales problemas que tiene el país, entre ellos su clase dirigente. Ni de lejos. Se trata del ejemplo. Debe conducir no el que tiene más, sino que el es más y mejor, y el hato de inútiles que cobijan las cámaras de todo el país, juntos, en un hervor, no dan ni para caldo.
Como si fuera poco, a partir de diciembre se incorporan nada menos que el Pingüino en persona, Clotilde Acosta, más conocida por el alias de Nacha Guevara, y una kinesióloga chaqueña que supo ser ministra de Salud Pública y durante el dengue fumigar una vereda y la otra no porque estaban los contras, aparte de hacerles mierda en la playa de estacionamiento los últimos modelos de la contra.
No son más berretas porque no se entrenan. Y menos mal que cada vez menos, pero entre el surtido vienen algunos que la posan de izquierdosos.
Padre nuestro que estás en los Cielos, iluminalo a Berdoglio. Aunque sea con un linterna y con lo reaccionario que es porque ya es de lo último que nos va quedando.