viernes, agosto 7

SE ACABO LA BENEFICENCIA

HASTA EL PROXIMO SUBSIDIO

Julio Humberto se llevó la pelota y no hay fútbol. No empieza el Apertura. La tevé tiene que poner más plata, de modo que a la AFA (Es decir, Julio Humberto) le quedan limpitos poco más de 4 dólares por abonado al cable y los clubes tienen que pagar todas las deudas a sus jugadores. Si no, se acabó. A los parques con los chicos y pasear las novias. Los ruegos de los futbolistas agremiados y los dirigentes tirando la manga cayeron en saco roto. Desesperados, como siempre, fueron al Estado, fuente de toda razón y justicia, y se encontraron con que como siempre darían el oro y el moro por no tener más despelotes, lo que no tienen es más plata y el país está haciendo agua.

Nos hemos cansado de decir que en la Argentina todo lo que empieza deportivo no tarda en devenir político. El gasto público a la marchanta de un Kirchner que creyó que todo el año es carnaval y ya está pensando delicadamente en hacer los petates, si es que hace a tiempo y no se los hacen antes porque no hay quien se los haga, hace mucho que tiene en el fútbol el modelo. La caja chica que hace 30 años maneja discresionalmente el ferretero de Sarandí no es para nada diferente del de Río Gallegos y su grupo de choque, el ferretero de San Martín. Los 150 mil dólares de sueldo a Maradona como DT de la selección con un pie afuera del próximo mundial y los 90 de Carlos Bianchi como manager, autorebajados al 50% como un gesto patriótico que marcará escuela es la muestra del descerebramiento que siempre rigió a la pasión de multitudes. Alberto El Beto Acosta no pudo ni asumir como manager de San Lorenzo porque no alcanzaron a juntar plata ni para el taxi. En España el gobierno tuvo que intervenir para que se dejan de tanta pavada y de dilapidar dineros que no tienen. El potlash del fútbol se terminò en un capitalismo que se derrumba.

Bueno, todo esto por ahora. Porque hasta Frondizi mandó a armar un partido internacional con México para parar el golpe de Estado.

Es cierto: lo mismo le dieron una patada en el culo y terminó en Martín García, pero como dijo El 10 en 1994, cuando el cóctel de efedrina junto con todos los que lo acompañan ahora en el Cuerpo Técnico de la AFA, "la Argentina es un país que vive de fútbol."

No. Ni se equivocó el de Villa Fiorito ni hay un error de tipo. No vive del fútbol, sino de fútbol. Ojo.